MONICIONES PARA EL DOMINGO XXVI DEL TIEMPO ORDINARIO.CICLOA.

MONICIÓN DE ENTRADA.

Bienvenidos hermanos a la celebración dominical de la Eucaristía en donde el Señor se hace presente fortaleciéndonos en la fe y en el amor. Pongamos nuestra vida en su presencia y dejemos que su misericordia nos lleve por caminos de conversión de forma que el anuncio del evangelio sea una realidad gozosa para todos.

MONICIÓN A LA PRIMERA LECTURA ( Ez. 18,25-28)

Es la justicia de Dios lo que hemos de buscar y no acusar a Dios de nuestras injusticias. El Señor siempre esta ofreciendo su mano al malvado para que se convierta y se salve, nos dice el profeta Ezequiel.

SALMO RESPONSORIAL ( Sal. 24) “ Recuerda, Señor, que tu misericordia es eterna.”

MONICIÓN A LA SEGUNDA LECTURA ( Fil. 2,1-11)

En centro de la comunidad cristiana ha de estar en Cristo. Desde el momento que eso no sea así se hacen presentes la envidia, la ostentación, el rencor...Se hace necesario tener los sentimientos propios de una vida en Cristo Jesús.

MONICIÓN AL EVANGELIO. ( Mt. 21,28-32)

Jesús hablando a los sumos sacerdotes y a los ancianos del pueblo nos recuerda la necesidad de ser fieles a la vocación a la que hemos sido llamados traducida en servicio y fidelidad.

ORACION DE LOS FIELES.

1.- Oremos al Señor por toda la iglesia para que se esfuerce por estar centrada en Cristo y siempre dispuesta a la conversión.

2.- Oremos por el Papa Francisco, por todos los obispos, sacerdotes y religiosos, para que sean fieles a la vocación y al servicio al que se les llama.

3.- Oremos por todos los que pasan necesidades económicas, por los que no tiene trabajo, por los marginados y los que no tienen hogar.

4.- Oremos por los niños que inician el curso, los profesores y sus padres y por todos los que en nuestra parroquia se entregan, día a día, a anunciar el evangelio con su vida visitando a los enfermos y acompañando a los necesitados.