sábado, 16 de septiembre de 2017

El suicidio, primera causa de muerte externa en España…

…y las campañas institucionales de prevención lo omiten.

Fue esta una noticia que días atrás oí en la televisión mientras estaba enredando en la cocina a la hora del medio día; me quede parado para  enterarme bien de lo que mis oídos, sorprendidos, escuchaban... Seguí con mi trajín dandole vueltas al tema y, he de reconocer, sorprendido, preocupado, con lo que oí.
Pensaba para mis adentros cuales pueden ser las causas que lleven a las personas a quitarse la vida   y descubrí que pueden ser muchas, desde un fracaso sentimental hasta un embargo, la soledad, el sin sentido de la vida, que a veces  se apodera  de nosotros o cualquiera otra  que vaya mas allá de los limites humanos, también la enfermedad.
Esta reflexión que, someramente traslado a esta pagina, me llevo a pensar sobre la calidad de mi relación con los otros. Por el cargo y ministerio que desempeño tengo la ocasión de hablar con muchas personas a lo largo de una semana. Yo ya he descubierto hace rato que cada persona es un mundo de sensibilidades, emociones, alegrías y tristezas, cada persona es única; esto me  lleva a mirar mi interior en lo que a la relación con  la gente atañe. Descubro que tengo que movilizarme y estar mas atento a la capacidad de escucha, de comprensión, de paciencia, de consejo; en una palabra, de acojida.
El suicidio es algo que se trata de  ocultar por lo que tiene de fracaso y de vergonzoso, también  nos dicen que se oculta para que no cunda el ejemplo.  Creo que hay algo mas y es que es una muerte que  en el fondo  nos interroga a todos, no solo a los que se relacionaban de forma directa con el que se quita la vida, como pueden ser su familia, amigos o vecinos. También nos interroga a cada uno de nosotros, a todos, que nos enteramos porque nos lo cuenta alguien, los periódicos no suelen contar estas noticias,. nos entristece, pero pronto olvidamos el tema  casi al dar la vuelta...Eso no quiere decir que no siga ahí y que no deje de ser un problema social y humano, una responsabilidad de todos, directa o indirectamente, también de los servicios públicos y del gobierno.
  Ante este tema debería ponerse en marcha un serio programa para tratar de paliar; no nos podemos conformar solamente con el Teléfono de la Esperanza, que hace muy buena labor; ante la evidencia se hace necesario que se amplíe y complete la que ya se hace, que  ayude a tomar conciencia de que este es un problema que está ahí , que es de todos y que mas tarde o mas temprano nos puede llegar.
 Esta bien que los gobiernos se preocupen de la economía, del paro y de todo lo que tienen entre manos, también de la salud publica que no  consiste solo en aliviar un dolor o hacer una operación... La salud publica abarca mas y es que nos damos cuentanos de que hay otras cosas que no se pueden obviar. Hay otros sufrimientos que se ocultan y que también llevan o pueden llevar, a la muerte.
 El tema ha de ser planteado como  labor de todos  y puesto que  pasa en nuestras calles  es bueno que tomemos conciencia de ello y  hagamos lo poco o lo mucho que este en nuestras manos para  solucionarlo.
José Rodríguez Díaz
 

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