jueves, 31 de enero de 2013

AVE MARÍA DE SCHUBERT

El violinista y director de orquesta André Rieu recibió un mensaje de una señora holandesa que le contó que su sobrina Mirusia Louwerse; de padres holandeses, nacida, criada, y residente en Australia (1985); parecía un ángel y cantaba como los ángeles.

 

Al principio él no se lo creyó mucho, pero la señora fue tan insistente que él, un poco a regañadientes, accedió a recibirla en audición.

Quedó cautivado, y en el 2008 la invitó a esta presentación donde se filmó en vivo su interpretación del AVE MARIA, de Schubert.

Es, verdaderamente, celestial.


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‘Haciendo Iglesia’ entrevista al argentino Juan Colomina
Este fin de semana entrevistaremos a Juan Colomina que junto con su esposa nos han llegado desde Argentina  hace ya unos cuantos años. La fe en el Señor Jesús ha sido y es el viento que  empuja su nave. ¿Cómo viven entre nosotros, ? ¿ qué ha significado la fe para ellos a lo largo de todo este tiempo? ¿ en  qué les ha ayudado? Ilusiones,  alegrías y penas…toda una vida.
Tendremos conexión con Lanzarote y como siempre, el bloque de noticias y la lectura del Evangelio del domingo correspondiente, a la 1 de la tarde del sábado o a las 8 de la tarde del domingo

sábado, 26 de enero de 2013

DOMINGO TERCERO DEL TIEMPO ORDINARIO.CICLO C

 IGLESIA = NAZARET ...?
En este domingo tercero del tiempo ordinario el Evangelista San Lucas despues de declararnos su intención y decirnos a quien  dedica toda su obra nos lleva de la mano hasta Nazaret, el pueblo de Jesús. 
 Allí le encontramos en medio de sus paisanos en sábado, en la sinagoga, es el día del Señor, como todo buen judio, leyendo la palabra de Dios que le  lleva a manifestarse, porque ya es el tiempo  previsto, como aquel de quien hablaron los profetas. Se aplica a sí mismo el texto de Isaías en medio de la solemnidad que  provoca la lectura de esta palabra tan vieja y tan cargada de esperanza y ante la espectación de los que están deseosos de oírle hablar: Por fin tenemos con nosotros al hijo de José que nos dirige la palabra, por fin tenemos ocasión de escucharle, pesarían.
Jesús, atribuyéndose lo que acaba de proclamar en medio del respeto de los asistentes, les indica que el momento de la acción  liberadora de Dios se está cumpliendo y lo hace como un canto a la libertad, a la renovación de todo lo herido, al perdón. Ese : "Hoy se cumple esta Escritura que acabáis de oír" nos lo está indicando.
No va a quedar encerrado en las cuatro paredes de la sinagoga en la que se pronuncio. Esa palabra leída y releída tantas veces, por generaciones de judíos piadosos que provocaba unas veces esperanza y otras desconsuelo, porque no se veía  ni intuía su cumplimiento inmediato, y que en mas de una ocasión provoco alguna que otra lágrima de  dolor, hoy, de repente, encuentra cumplimiento y es un hijo del pueblo, uno que ha crecido entre nosotros y que tantas veces ha compartido la oración en esta sinagoga, el que nos dice  que con el se cumple y se inicia  ya  esa obra  de liberación prometida por Dios.
De nuevo nos encontramos con la acción de Dios que actúa en la historia valiéndose  de los  acontecimientos que el hombre vive y lleva acabo, sin romper esquema, sin violentar libertades y ofreciéndose como salvación que libera y se empeña en poner al hombre de pie: " El Espíritu del Señor está sobre mí, porque él me ha ungido. Me ha enviado para dar la Buena Noticia a los pobres, para anunciar a los cautivos la libertad, y a los ciegos, la vista. Para dar libertad a los oprimidos; para anunciar el año de gracia del Señor"
Es el programa de vida que Jesús hace suyo. Es, digamos, su hoja de ruta de la que en muchas ocasiones van a intentarle apartar, pero que el no dejará por nada del mundo. Es el Amor de Dios que se manifiesta en el Hijo Amado.
Lucas a gustado situar en Nazaret los comienzos de la obra de la salvación, de la  renovación de todo lo creado, de su restauración, con la Encarnación primero y ahora con  la proclamación de que el Reino de Dios ya está empezado.

Hoy la iglesia está llamada a ser ese Nazaret en donde Dios se hace hombre, donde, como hombre, asume el compromiso contraído por Dios con los padres,  muchos años atrás, de  anunciar la liberación y el socorro a los que lo necesitan y eso no puede quedar encerrado en sus cuatro paredes, lo mismo que  no quedo ocultó en las paredes húmedas de aquella sinagoga. Hay que sacarlo a la luz, darlo conocer a los demás, anunciarlo a los hombres, en una palabra, hacerlo vida.
 El anuncio de la iglesia no puede ser nunca distinto ni estar de espalda al anuncio que Jesús hizo en su día y vivió con transparencia de vida hasta el último  instante: "Hoy estarás conmigo en el paraíso"
Si así lo hiciera, no sería la iglesia de Jesús, sería otra cosa.
FELIZ DÍA DEL SEÑOR.

viernes, 25 de enero de 2013


En ‘Haciendo Iglesia’, “la fe en lo cotidiano”
Entrevistaremos a dos madres de familia que trabajan fuera de casa para poder atender las necesidades famliares. ¿Para que  les sirve el ser Creyentes? Ellas nos lo dirán. Como siempre el bloque de noticias, música, reflexión y lectura del Evangelio del domingo. Todo ello en "Haciendo Iglesia”, el sábado a las 13.00 horas y el domingo a las 20.00 horas.

jueves, 24 de enero de 2013

Carta de una joven alumna a un rector preocupado por la fe

Estimado D. José Carrillo, Rector de la Universidad Complutense
Sé que estará usted muy liado y no tendrá mucho tiempo, pero confío en que esta carta llegue a sus manos antes de que sea tarde.
Dado el cargo de rector que desempeña y las responsabilidades que éste conllevan, creo que tendría que interesarse por la opinión de una de sus muchos alumnos de la Universidad Complutense acerca de las políticas que quiere llevar a cabo, porque éstas se hacen para que esos alumnos, personal docente y trabajadores de la UCM se encuentren lo más satisfechos posibles y contentos con esta Universidad y en mi caso, y en el de muchos otros, hay una en concreto que está haciendo mucho daño: la proximidad del cierre de las capillas.
A mi juicio, las capillas que hay ahora mismo abiertas en las facultades, que si no estoy mal informada son nueve, no hacen ningún daño a nadie; es más, hacen muchísimo bien a mucha gente. 
 
 
 Además, suponen coste cero para la Universidad, ya que es el mismo Arzobispado el que se encarga de gestionarlas y cuidarlas, así como de remunerar a los capellanes que las dirigen.
Por eso, no entiendo la necesidad de quitarlas; para muchos, incluida yo, al quitarlas de las facultades nos harían polvo y estaríamos perdiendo un derecho que nos concede la Constitución Española, que es el de libertad religiosa y de conciencia, en los artículos 16 y 20; y otros decretos oficiales como la Declaración Universal de los Derechos Humanos:
"Toda persona tiene derecho a la libertad de religión; este derecho incluye la libertad de manifestar su religión, individual y colectivamente, tanto en público como en privado, por la enseñanza, la práctica, el culto y la observancia”
O como el Código Penal:
"Incurrirán en pena de multa de ocho a doce meses los que, para ofender los sentimientos de los miembros de una confesión religiosa, hagan públicamente escarnio de sus dogmas, creencias, ritos o ceremonias, o vejen, también públicamente, a quienes los profesan o practican”
Por eso, al querer quitar las capillas, lo que está haciendo es no solo no respetar a la Iglesia, que, como puedo observar, no le importa demasiado, sino que tampoco me respeta a mí y a todos los que forman parte de la UCM que profesamos la misma fe, y me parece que valores como la tolerancia o el respeto son valores que tendríamos que tener todos, y que ya que es usted el que dirige toda una gran empresa de formación de jóvenes alumnos, aparte de la formación académica que tenemos que tener cuando terminemos nuestras correspondientes licenciaturas o grados, también es una empresa que debe enseñar y cultivar los valores de la persona, y que los que se encuentran a la cabeza de ésta, como es usted en este caso junto con todos los que forman parte de los decanatos, deberían ser los primeros en dar ejemplo y en llevarlos a la práctica de su día a día.
Como respuesta a muchos que argumentan diciendo que si hay capillas católicas que también haya lugares de culto para judíos o musulmanes, a mí me parece fantástica la idea, me parecería estupendo que se habilitara una sala que no se utilice en las facultades, que de esas hay varias porque yo he visto más de una, y así, igual que hay capillas en las facultades, que también haya lugares de culto para ellos, aunque desconozco si tanto judíos como musulmanes sienten la misma necesidad de tener un lugar donde acercarse a su dios, como yo la tengo con el mío, por lo que solo puedo hablar de mi religión. 
Por tanto, intentando ser lo más escueta posible para que no pierda el tiempo leyendo mi carta, le pido por favor que no ponga en marcha este plan, ya que saldríamos muchas personas perjudicadas y nos haría mucho daño, atentando contra nuestra persona y nuestras creencias.
Reflexiónelo bien y piense en las consecuencias que puede llegar a tener, además de estar incumpliendo el acuerdo de 1992 que su anterior sucesor, Gustavo Villapalos firmó con monseñor Ángel Suquía, por entonces arzobispo de Madrid y que sigue teniendo vigencia desde hace más de veinte años.
Sin más dilación y atentamente, 
Ana Martín.
PD: le copio una de las frases que D. Juan García Izna, Dr. en Derecho Canónico le escribía en una carta abierta hace unos días para que la medite: "Sr. Carrillo, demuestre usted ser verdadero universitario teniendo siempre abiertas las puertas a todo el saber, también al de la Teología. Si usted cierra las puertas a Dios en su Universidad, Dios se colará por las ventanas. No se puede poner puertas al campo, y el campo de la fe es demasiado amplio para querer reducirlo a la conciencia individual y privada de los creyentes.”
 

domingo, 20 de enero de 2013

PREGUNTAS Y REPUESTAS

   ¿POR QUÉ SE LLAMA BOLSA, AL LUGAR DONDE SE COMPRAN Y VENDEN VALORES?
 Por Mari Sánchez
Preguntándome sobre qué podría hablar esta semana, encontré en mi viejo baúl, un argumento que nos habla de un tema que, en estos momentos, está en el candelero. Todos conocemos y, son muchos los que la padecen, la situación de quiebra por la que están atravesando nuestros bancos y, que como siempre pagamos todos, menos ellos.

Son muchas las familias que, a consecuencia de la tan traída y llevada crisis, se han quedado sin trabajo; cosa que se agrava si para más INRI tienen una hipoteca. El banco, sin pensarlo dos veces, corta por lo sano quedándose con el piso.
La desahuciada familia se queda en la calle y sin llavín, nunca mejor dicho, pero con una deuda que pagar la cual ha llevado, en más de una ocasión, al suicidio de padres y madres, que desesperados, no ven otra salida a esta ley de “desahucio en el pecho”
 Es de total despropósito que, a una persona le cueste la vida el no poder hacer frente a ese pago, cuando los cuatro sinvergüenzas que son los responsables de todas esas malas gestiones, se vayan de rositas o, peor aún, se jubilen con un sueldo, que lleva tantos ceros, como de largo es el rabo de un cometa.
 Mientras nuestro querido gobierno sigue inyectando dinero, yo diría que por vena, a estos bancos. Dinero que además se reparten los socios pues, según escuché no hace mucho, cuando a las arcas del banco entran fondos los financieros y mandamases tienen derecho a un porcentaje de ese dinero ¿?
 De lo que sí estoy completamente segura es del daño tan irreparable que están haciendo estos “chupópteros” Primero, elevando del modo que lo hacen, los intereses a pagar por el capital prestado. Segundo, la  cruel injusticia que cometen dejando sin techo a una familia. Y, lo que es peor, que todo esto ocurra con el beneplácito de nuestro querido gobierno.  Si bien es verdad que las cosas están empezando a cambiar, gracias a las miles de personas que se han echado a la calle, protestando ante tamaño desacato y desfachatez de estos ¿Señores?
 Pero, sepamos por qué se da este nombre al lugar donde se presta dinero.
Su origen viene de lejos, concretamente de Bélgica, y data del año 1400. Desde esa época en las ferias medievales; plazas, tabernas y cualquier otro lugar se compraban títulos y valores mobiliarios.
Una teoría nos cuenta que, el nombre de “Bolsa de valores”, llega por las reuniones que se efectuaban  en el castillo de la familia de banqueros Van der Bourse, en la ciudad de Brujas, (Bélgica). Esta familia tenía organizado un mercado de títulos de valores y, ya que Bourse en francés, significa “Bolsa” es de ahí de donde nos llega el nombre.

sábado, 19 de enero de 2013

SEGUNDO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO. CICLO C.

 SALVAR EL AMOR.
El relato del Evangelio de esta semana nos lleva de la mano del Evangelista San Juan  hasta Caná de Galilea en donde Jesús junto con su Madre y sus discípulos disfrutan de una fiesta tan familiar como  es una boda.
Y sucede, como todos sabemos, que se quedan sin vino y que por la intervención de María, Jesús soluciona el problema a esta familia que se veía en un serio aprieto.
  Aunque aún no había llegado su hora, la hora de manifestarse y de manifestar en plenitud el proyecto de Dios para con el hombre, accede a la sugerencia de su Madre y convierte las tinajas de agua, dispuestas para la purificaciones, en tinajas de vino. El mejor vino que hasta el momento se había servido en aquella fiesta..
Hasta aquí todo parece normal y sin meternos en laberintos exegéticos, podemos decir de entrada que Jesús salva la fiesta motivada por el amor de los novios, con su presencia, su palabra y su acción, ante la oportuna sugerencia de alguien muy cercano a El que le impele a que adelante su hora. Al tiempo que  su papel de madre, por el momento, va a quedar en las sombras y solo será  sacado a la luz en momentos muy concreto, pero siempre en relación con la palabra y con los demás. 
Jesús es ¿empujado? a ocupar el puesto  por los que  tiene a su alrededor, primero ha sido el Bautista  que lo señala y le reconoce en autoridad y derecho y ahora es su Madre quien le da el último empujoncito aunque El manifieste que no ha llegado su hora.
 Empieza la hora, el tiempo de Jesús y termina el tiempo de los demás, aunque estos tiempos de los otros simbolizados en Juan y en María: palabra proclamada y palabra aceptada, no quedan en el olvido sino que son integrados en el suyo dándoles plenitud y cumplimiento. Aún  no es su tiempo definitivo.
Se inicia el tiempo del salvar el amor, todo amor, el de Dios y el del hombre.  Esto solo lo puede hacer alguien que sea Dios y hombre verdadero y ese es Jesús.
A destacar que en este acontecimiento está presente la Iglesia naciente, la misma que luego, en Pentecostés, recibirá el Espíritu Santo y el encargo de llevar la Buena Noticia del Amor de Dios a todos los pueblos. Amor de Dios necesitado del amor del  hombre, para  poder concretarse en la historia del mundo. 
 Hoy la Iglesia, nosotros, los herederos de aquella primera que ya se gestaba  en Caná de Galilea, la que ha de llevar a cabo esta misión: salvar el amor de Dios y el amor del hombre.
 El amor hay que salvarlo, no solo en nuestros tiempos, sino en todos los tiempos. Esto sólo se consigue amando, amando como Dios nos ama. Como nos amó, nos ama y nos amará Jesús. Por eso no le importó adelantar su hora.
 La es Iglesia, sacramento, Cuerpo de Cristo, la que está llamada a adelantar su hora porque se hace urgente salvar el amor, salvar todo amor, ofreciendo al hombre la posibilidad de degustar el vino nuevo de la Pascua Nueva, el de las bodas de Cristo con su Iglesia, para que el hombre disfrute en plenitud de la fiesta de la vida
Feliz día del Señor.   

jueves, 17 de enero de 2013



“Mi hijo es cura”, en ‘Haciendo Iglesia’
El testimonio de la madre de un sacerdote ocupará buena parte del programa de esta semana en ‘Haciendo Iglesia’. Hablaremos del día de las Migraciones. Y también tendremos la habitual conexión con Lanzarote y bloque de noticias.
Este programa se emite los sábados a la 1 de la tarde y los domingos a las 8 de la noche.

miércoles, 16 de enero de 2013

OBRAS SOM AMORES...



LA A.V. EL ROQUE AZUCARERO HACE ENTREGA DE COMIDA, AL CENTRO DE ACOGIDA SAN FRANCISCO DE ASIS, EN JINAMAR

 .

El lunes 13 de Enero, partimos desde la A.V. El Roque Azucarero, con el corazón repleto de ilusión y los coches, cual modernos camellos de reyes magos, repletos de la comida que, durante las fechas Navideñas, se recopiló gracias a la colaboración y donativo de personas anónimas. También se hicieron diferentes sorteos y un pequeño rastrillo.
 Lo importante era sacar unos €uros para hacer más y más grande la compra de alimentos tan necesaria para las personas, que cada día, van a comer un plato de comida caliente.

 Al llegar fuimos saludados, cariñosamente, por uno de los chicos de los varios que en ese momento se encontraban terminando su cena. El centro está dirigido por la hermana Ana Mª ayudada por unas voluntarias, para las que no tengo calificativos con el que valorarlas como se merecen, ya que han llegado a involucrar a sus esposos, para que también, “echen una manita.”

Una vez que se dejó la comida, fuimos invitadas a conocer el centro. Éste es pequeño pero acogedor, limpio y, donde todo está en su lugar correspondiente, como pueden apreciar en las fotos que se adjuntan.
Disponen de un salón de reuniones, despacho y despensa. Anexo se encuentra la cocina- comedor, sala de televisión, cuartos de baños y cuartos de lavadoras.  

Había pasado la hora de la cena y tocaba; recoger, fregar y limpiar. Todo esto lo hacen los chicos, ayudados y dirigidos por las voluntarias. Tocaba, así mismo, la hora del aseo personal y posterior lavado de ropa (Esto corre a cargo de las voluntarias)  

 Los muchachos que acuden al centro de acogida San Francisco de asís, son los que un día desgraciado, no vieron otra salida a su vida y a sus problemas que buscarla en la droga. Por suerte algunos han podido soltar un poco las amarras e intentan retomar sus vidas, gracias a la ayuda y el cariño de estas mujeres, que lo dan todo a cambio de nada y son inmensamente felices.

domingo, 13 de enero de 2013

TESTIMONIO DEL PADRE ANTON LULI

Enviado por Ana María Zarzo PDF Imprimir E-mail

Clavado en la cruz al ser ordenado sacerdote
Acababa de ser ordenado sacerdote cuando a mi país, Albania, llegó la dictadura comunista y la persecución religiosa más despiadada. Algunos de mis hermanos en el sacerdocio, después de un proceso lleno de falsedades y engaño, fueron fusilados y murieron mártires de la fe. Así celebraron, como pan partido y sangre derramada por la salvación de mi país, su última Eucaristía personal. Era el año 1947. Apenas había terminado mi formación.
A mí el Señor me pidió, por el contrario, que abriera los brazos y me dejara clavar en la cruz y así celebrara, en el ministerio que me era prohibido y con una vida transcurrida entre cadenas y torturas de todo tipo, mi Eucaristía, mi sacrificio sacerdotal.
El 19 de diciembre de 1947 me arrestaron con la acusación de agitación y propaganda contra el gobierno. Viví diecisiete años de cárcel estricta y muchos otros de trabajos forzados. Mi primera prisión, en aquel gélido mes de diciembre en una pequeña aldea de las montañas de Escútari, fue un cuarto de baño.
Cárcel con excrementos y distintos métodos de tortura
Allí permanecí nueve meses. Me tenía que acurrucar sobre excrementos endurecidos y sin poder enderezarme completamente por la estrechez del lugar. La noche de Navidad de ese año -¿cómo podría olvidarla?- me sacaron de ese lugar y me llevaron a otro cuarto de baño en el segundo piso de la prisión, me obligaron a desvestirme y me colgaron con una cuerda que me pasaba bajo las axilas. Estaba desnudo y apenas podía tocar el suelo con la punta de los pies. Sentía que mi cuerpo desfallecía lenta e inexorablemente. El frío me subía poco a poco por el cuerpo y, cuando llegó al pecho y estaba para parárseme el corazón, lancé un grito de agonía. Acudieron mis verdugos, me bajaron y me llenaron de puntapiés. Esa noche, en ese lugar y en la soledad de ese primer suplicio, viví el sentido verdadero de la Encarnación y de la cruz.
Con mucha frecuencia me torturaban con la corriente eléctrica: me metían dos alambres en los oídos. Era una cosa horrible. Durante un tiempo me amarraban las manos y los pies con alambres, y me echaban al suelo en un lugar oscuro, lleno de grandes ratas que me pasaban por encima sin que yo pudiera evitarlo. Llevo todavía en mis muñecas las cicatrices de los alambres que se me incrustaban en la carne. Vivía con la tortura de permanentes interrogatorios, acompañados de violencia física. Recordaba entonces los golpes sufridos por Jesús al ser interrogado por el Sumo Sacerdote.
Consoladora presencia de Jesucristo
Una vez me colocaron delante un papel y un bolígrafo y me dijeron: Escribe una confesión de tus crímenes y, si eres sincero, podríamos hasta mandarte a casa. Para evitar golpes y bastonazos empecé a llenar alguna página con los nombres de muertos o de fusilados, con los que nunca tuve nada que ver. Al final añadí: Todo lo que he escrito no es verdadero, pero lo he escrito porque me obligaron. El oficial empezó la lectura con una sonrisa de satisfacción, seguro de haber logrado su objetivo, pero cuando leyó los últimos renglones, me golpeó y, blasfemando, ordenó a los policías que me llevaran fuera, gritando: Sabemos cómo hacer hablar a esta carroña.
Pero en esos sufrimientos tuve a mi lado y dentro de mí la consoladora presencia del Señor Jesús, sumo y eterno sacerdote, a veces, incluso, con una ayuda que no puedo menos de definir “extraordinaria”, pues era muy grande la alegría y el consuelo que me comunicaba.
Al salir de la prisión, me enviaron a trabajos forzados como obrero en una finca estatal: me pusieron a trabajar en la recuperación de los pantanos. Era un trabajo fatigoso y con la poca alimentación que teníamos se nos reducía a gusanos humanos: cuando uno de nosotros caía extenuado, le dejaban morir. Pero en aquella etapa logré decir misa de manera clandestina y sólo desde el ofertorio hasta la comunión. Conseguí un poco de vino y algunas formas, pero no podía confiar en nadie ya que si me descubrían, me hubieran fusilado. En este trabajo en los pantanos estuve 11 años.
Condenado a pena de muerte
El 30 de abril de 1979 me arrestaron por segunda vez, me registraron y me llevaron a la ciudad de Scurati. No tenía consigo más que el rosario, un cortaplumas y el reloj. Después de la requisa me tiraron al suelo de una celda. Me daba cuenta que me dirigía a un nuevo calvario; pero de improviso la desolación dio paso a una extraordinaria experiencia de Jesús. Era como si Él estuviera allí presente, de frente a mí, y yo le pudiera hablar. Fue determinante para mí. Comenzaron de nuevo las torturas y otro proceso: el 6 de noviembre de 1979 me condenaron a a morir fusilado. La causa que adujeron fue sabotaje y propaganda antigubernativa. Pero, dos días después, la pena de muerte fue conmutada por 25 años de prisión.
Prácticamente he conocido la libertad a los 80 años, cuando en 1989 pude celebrar la primera Misa en libertad. Pero hoy, recorriendo con mi pensamiento mi propia existencia, me doy cuenta de que la misma ha sido un milagro de la gracia de Dios y me sorprendo de haber podido soportar tanto sufrimiento, con una fuerza que era la mía, conservando una serenidad que no podía tener otra fuente que el corazón de Dios.
Abrazo a un verdugo
Esta es mi experiencia sacerdotal en todos estos años; una experiencia, ciertamente, muy particular con respecto a la de muchos sacerdotes, pero desde luego no única: son millares los sacerdotes que en su vida han sufrido persecución a causa del sacerdocio de Cristo. Experiencias diversas, pero todas unificadas por el amor. El sacerdote es, ante todo, una persona que ha conocido el amor; el sacerdote es un hombre que vive para amar: para amar a Cristo y para amar a todos en Él, en cualquier situación de vida, incluso dando la vida.
Pero hoy, contemplando la gloria de María en el Cielo, y pensando que también a nosotros se nos ofrece esta gloria futura con Dios, no puedo hacer otra cosa, que dirigirme a vosotros, queridos hermanos sacerdotes, con las palabras de san Pablo: “Porque estimo que los sufrimientos del mundo presente no son comparables con la gloria que ha de manifestarse en nosotros” (Rom 8, 18). Contemplamos la gloria de María en el cielo, permanecemos fieles, en pie, con fuerza y dignidad cerca de la Cruz de Jesús, sin importarnos el modo en que esa cruz se presente en nuestras vidas. nosotros somos personas que nos entregamos al amor de Cristo. ¿Quién nos podrá separar de este amor? Éste es el verdadero mensaje de mi experiencia de vida. En todos los momentos de sufrimiento y de dificultad “nosotros salimos vencedores gracias a Aquél que nos amó” (Rom 8, 37).
Pero nunca he guardado rencor hacia los que, humanamente hablando, me robaron la vida. Después de la liberación, me encontré por casualidad en la calle con uno de mis verdugos: sentí compasión por él, fui a su encuentro y lo abracé."

Padre Anton Luli S.J.
Tomado de " caminocatólico.org" 

sábado, 12 de enero de 2013

TRECE DE ENERO: FIESTA DEL BAUTISMO DEL SEÑOR

 UN CAMINO POR ANDAR
Terminamos el tiempo  de Navidad con esta fiesta del Bautismo del Señor abriendo un compás de espera con el tiempo Ordinario hasta la Cuaresma.
Pero vayamos a la fiesta de este domingo que es la que ahora mismo nos interesa. 
La escena nos la cuenta Lucas que empieza diciéndonos que el pueblo estaba en espectación, - en una espera  esperanzada y alerta -, hasta el extremo de que se preguntaban si Juan no sería  el Mesías. El Bautista  habla claro dando un  testimonio valiente que no deja lugar a la dudas. Dice la verdad sin aprovecharse de la ocasión para medrar o ser aplaudido o que le siga la gente. Juan dice: Yo no soy el Mesías. El bautismo que yo os imparto en preámbulo del que os de el Mesías, que es mas que yo y será con "Espíritu Santo y fuego".
 Estando en esta situación es cuando aparece Jesús, que no busca protagonismo, hace fila con los que buscan a Dios, con los que se sienten pecadores y ansían su venida, en un bautismo general.
 Lucas tiene bastante cuidado al relatarnos esta escena, pues  nos dice que se bautizó y que mientras Jesús oraba, se produce el testimonio del cielo : El Espiritu Santo se hace presente junto con la voz del Padre que lo reconoce: "Tú eres mi Hijo, el amado, el predilecto"
Es un texto corto, pero muy sugerente. Así que vamos a tratar de sacar alguna conclusión para nuestra vida de cristianos, para lo de cada día.
De entrada tenemos la transparencia de Juan no arrogándose nada que no le pertenezca, diciendo la verdad, no llevando a engaño a la gente, no creando falsas espectativas sobre su persona ni permitiendo que la gente se las cree, ante la necesidad que experimentan de la acción de Dios en sus vidas. Transparencia, fidelidad y entrega sincera a la misión  que se le ha encomendado. No soy mas que lo que soy.
Luego aparece Jesús. Aún no revelado por el Padre. Son los momentos finales de su vida oculta. Va a ser señalado de entre la gente. Pero hasta ese momento estará confundido ente ellos y con ellos. Es en el momento del bautismo y estando en oración cuando el cielo lo reconoce como Hijo. El acepta la misión y a partir de la cual, su ser Hijo ira  creciendo de forma paulatina a medida que vaya  incorporándose a la vida de los hombres como el amado, el predilecto, el reconocido por el Padre , pero sin  apartarse de los hombres, estando  cada vez mas cercano a los pecadores y a los buscadores de Dios. Esta opción le llevará al extremo de dar su vida por ellos, no sin antes  haberles perdonado, porque no sabían lo que hacían.
Concluimos: Verdad, transparencia y sinceridad en Juan. En Jesús, oración, docilidad, aceptación y entrega como Hijo reconocido sin apartarse de los que buscan a Dios.
Creo que aún nos queda mucho camino por andar a nivel personal y como Iglesia ¿ No les parece ? 
FELIZ DÍA DEL SEÑOR.

Nos lo envía Ana María Zarzo

Tenemos esperanza

Autor: Santiago MARTÍN, sacerdote
Una mentira repetida miles de veces termina por convertirse en una verdad, al menos para la mayoría. Pero sigue siendo una mentira y todo lo que se construya sobre ella se pagará más pronto o más tarde, caerá por su propio peso porque estará edificada sobre cimientos falsos.
La mentira a la que me refiero es la de que el hombre está mejor sin Dios que con Dios, que la fe es enemiga de la democracia porque implica intolerancia y engendra violencia, que el hombre necesita desprenderse de Dios y de sus atadura morales para ser él mismo. Sobre esta mentira se ha construido el mundo durante los dos últimos siglos, acentuándose la demolición del mundo anterior según ha ido avanzando el tiempo, y también aumentando la influencia de la mentira en cada vez más numerosas capas de la sociedad.
Pero sigue siendo una mentira. Y las consecuencias de construir el mundo sobre ella no han dejado de producirse desde el primer momento, aunque sus difusores intenten a toda costa ocultarlas o minimizarlas.
Esto es, en resumen, lo que ha dicho el Papa en su hermosa homilía de Nochebuena. Han construido un mundo sin Dios porque decían que iba a ser más humano, más justo, más pacífico. Pero las guerras no sólo no han disminuido sino que han aumentado. La sociedad es más injusta y más violenta. La mujer no ha visto mejorar su condición sino que ésta he empeorado trágicamente al haber asumido como algo normal lo más monstruoso que pensarse cabe: que mate a su propio hijo y que lo reivindique como un derecho. Los ancianos no son mejor tratados por sus hijos o nietos, sino que son enfilados hacia las cámaras mortuorias de la eutanasia, con la excusa de que es por su bien y para que no sufran. Las familias no son más estables, sino que o no se forman o se rompen rápidamente, hasta el punto de que uno de cada diez niños ingleses ha pedido estas Navidades como regalo que le dieran un papá. Y así suma y sigue hasta la saciedad.

Nos dijeron que un mundo sin Dios sería un mundo feliz, pero Orwell o Huxley acertaron al describir el tipo de sociedad que nos están dando a cambio de haber hecho renunciar a tantos a la fe de sus mayores. El Papa tiene razón al denunciarlo, porque esta falacia, esta mentira, es la causa de la crisis. Y, sin embargo, no todo está perdido ni mucho menos. Como dice San Juan en el prólogo de su Evangelio, la oscuridad no quiere a la luz y aunque Él vino a los suyos con amor y por amor, los suyos no le recibieron. Pero no todos hicieron eso, y por ello el mismo evangelista concluye que “a cuantos le recibieron les da el poder ser hijos de Dios”. A pesar de los mil cuentos que nos cuentan cada día, a pesar de toda la publicidad en contra y de que te dicen hasta la saciedad que el consumismo, el hedonismo y el relativismo te pueden hacer plenamente felices, las iglesias han estado llenas estas Navidades. Porque a ninguno de nosotros nos pueden enseñar lo que ya sabemos: que con Dios somos mejores, tenemos más control de nuestro carácter y de nuestras pasiones, llevamos con más alegría y fortaleza las dificultades inevitables de la vida, somos más generosos para compartir con el que está sufriendo y, en definitiva, somos mejores personas, mejores amigos, mejores ciudadanos. Por todo eso, tenemos esperanza. Es su mundo el que se cae a pedazos, no el nuestro. Es su mentira la que siembra la tierra de cadáveres, mientras nosotros trabajamos para impedir que algunos de los que están moribundos porque han bebido su veneno mueran. Por eso, tenemos esperanza.

HISTORIAS SORPRENDENTES

 MONSTRUOS Y ENANOS.
Por María Sánchez. 
  Era tal el éxito que tenían estos seres en los teatros griegos que muchos padres, con escasos recursos económicos, deformaban a sus hijos desde pequeños con la ayuda de vendas y tablillas. Lo hacían con el fin de que fueran contratados para escarnio y regocijo de los mal llamados “humanos” El dinero que recibían les ayudaba a pagar la comida al resto de la familia.
Quiero pensar que tomar esta decisión era la cosa más dolorosa para unos padres que ven sufrir, casi desde su nacimiento, a un hijo que ha nacido con una deformidad, o verse forzados a deformarlos, por ser éste uno de los pocos medios con los que contaban para conseguir un poco de pan con el que saciar el hambre.  Imaginemos a un bebe con su cuerpo, constantemente aprisionado por unas vendas, que se van cambiando a medida que va creciendo.
Este método se usaba también con las niñas japonesas. La diferencia entre unos y otros era que a estas niñas sólo les vendaban los pies, la intención era que estos no crecieran, y una vez adulta tuvieran ese andar tan peculiar que poseen las mujeres japonesas.
No se asusten amigos lectores ni se lleven las manos a la cabeza, porque esto que les cuento a continuación, está sucediendo en pleno siglo XXI. La diferencia es que no ocurre en la antigua Grecia sino en la India. Es este, como todos sabemos, un país pobre y olvidado de la mano, y la conciencia, de los todos poderosos mandamases que tal mal la gobiernan.
En la India no se vendan a los niños aquí se venden a las niñas a los prostíbulos. Así es, por muy duro que pueda parecerles, pero esto, aún siendo inhumano, no es lo peor.
Lo trágico, doloroso y vergonzoso para los que nos hacemos llamar seres humanos, es que estas niñas tienen más valor económico cuantos más jóvenes son. Cuando digo jóvenes, no me refiero a las adolescentes de 13 años en adelante, por el contrario son más valoradas las menores. Niñas de 2 y 3 años.
Parece mentira he inverosímil pero, a parte de todo esto hay algo peor si cabe, y es el motivo por el  que son éstas las preferidas. Hay hombres, no todos por suerte, que a cambio de sentirse más varoniles son capaces de todo, incluso de creer que por tener sexo con una niña de 2 ó 3 años, se convierten en los más machos del mundo.
Este trato vejatorio se empeora cuando este hombre es un enfermo de sida. Llega a tal extremo su incultura que piensa que al tener relaciones sexuales con estas niñas, sin usar preservativo, les libran de esta enfermedad.
No me vale que digan que estas son sus costumbres o su cultura, esto no tiene disculpa posible. Para mí como mujer y, seguro que para los hombres, que miden su hombría por el amor y el respeto hacia todas las mujeres, estos seres que no hombres, son peor que animales.


jueves, 10 de enero de 2013


Testimonios de fe, en ‘Haciendo Iglesia’
Retomamos el año de la fe en ‘Haciendo Iglesia’ con testimonios de personas creyentes con quienes convivimos en nuestras parroquias. En esta ocasión charlamos  con  María Luisa González, de la parroquia de San Marcos en Escaleritas. Tendremos una entrevista con el Párroco de Nuestra Señora del Carmen, en la Isleta, Agustìn  Sánchez, con motivo de los cien años de la imagen de la Virgen en aquella parroquia. Además, habrá música, noticias y  como siempre, el Evangelio del domingo.
Este programa se emite los sábados a la 1 de la tarde y los domingos a las 8 de la noche

lunes, 7 de enero de 2013

"MADRE" DIOS.

POR AGUSTÍN CABRERA.

 Hace tiempo que vengo reflexionando sobre esta tema. Desde que el hombre es hombre no ha dejado de preguntarse ¿ Cómo es Dios? ¿  A qué o quién se parece?  ¿ A qué compararlo?

Al principio el hombre lo imaginó como un ser duro, al que no le temblaba el pulso a la hora de castigar a aquellos que no cumplian su voluntad. Nos hizo libres pero nos obliga bajo coacción a hacer lo que el quiere: Ahora, un diluvio, ahora una confusión de lenguas, ahora la conversión en sal, ahora...  Mucho miedo a Dios. Para colmo, no existe lugar donde esconderse porque siempre nos vigila y su mirada llega al lugar mas lejano y oscuro, que es donde nos escondemos para hacer las cosas que a el le desagradan y le irritan.
Jesús nos enseñó a llamarlo Abbá, que significa papá. Nos enseño que le pidiéramos cuanto quisieramos y que El, que siempre está atento a nosotros, nos irá dando lo que necesitamos  porque  ni siquiera sabemos pedir lo que nos hace falta. No es un Dios vigilante, presto al castigo, es un Dios atento a nuestras debilidades, presto a perdonarnos cuando se lo pedimos y acompañarnos, especialmente en los momentos  mas duros que nos toquen vivir. Un Dios cercano, un Dios Padre capaz de todo por sus hijos. Alguien que siempre está ahí y que nunca te abandona aunque tu lo hagas a veces. Un Dios que se define con una hermosa palabra: AMOR.

Soy nieto de Carmen, hijo de Loli, esposo de Mónica y padre de Tatiana: Cuatro mujeres,cuatro generaciones, una misma realidad. 

MI ABUELA.
Si busco en los recuerdos  de la niñez, encuentro a una abuela que siempre vio cuanto había de bueno en aquel travieso niño al que siempre justificaba diciendo : " el niño es bueno pero desinquieto". Siempre  tenía una sonrisa y un caramelo de nata para regalarme. Siempre tenía un sitio libre a su lado para sentarme y sentir su dulce calor.
 Con su agradable voz me contaba historias hermosas que siempre tenían una  moraleja. Me pedía que la acompañara  a misa y muchas veces recé con ella por las tardes. Mi abuela siempre rezaba por todos nosotros. Como mi padre la llamaba " Madre" y la trataba de usted, yo aprendi a quererla llamándola " Madre".  Aún hoy, 27 años después de su fallecimiento, la sigo echando de menos.

MI MADRE.
Mi madre tuvo muchísimo trabajo conmigo porque era realmente travieso. Siempre estaba haciendo trastadas. Me encantaba hacer hogueras y siempre que tenía unos céntimos los gastaba en fósforos para quemar cosas en cualquier sitio.
 Me dedicaba a jugar a la guerra tirando piedras a las pandillas que habían en el barrio y cuando le daba  a alguien en la cabeza, su madre iba a casa a dar las quejas a la mía y mi madre "sacaba a pasear la zapatilla".  De todos mis hermanos ( somos cuatro varones) yo fui el que mas gastó las zapatillas de mi madre, pero el mérito era sólo mío.
Esa madre que se desesperaba pensando qué saldría de aquel chiquillo travieso y que, a fuerza de zapatilla y mucha paciencia, enderezó, era también la que hablaba con los maestros en el colegio, la que se preocupaba de que hiciera los deberes, la que me llevaba al médico y se preocupaba de que no me faltara lo que necesitaba.
A pesar de merecer mucho carbón, mi madre le pedía a los Reyes Magos que me dejasen algo y sé que los Reyes Magos tuvieron que hacer  grandes esfuerzos para traerme un regalo porque la "cosa" no estaba bien y éramos muchos en casa. Mi madre se dejó parte de la vista haciendo colchas de ganchillo para que no faltara un juguete el día de reyes.
Mi madre ha sufrido con mi sufrimiento y se ha alegrado con mis alegrías. Siempre que la necesito  sé que está ahí.

MI ESPOSA
A mis hijos les digo que nunca me agradeceran lo suficiente por haber elegido tan bien a su madre. Mi esposa es un ejemplo de entrega. Cuando todos estamos cansados ella sigue en " la brecha". Siempre está pendiente de nuestras necesidades. 

Cuando alguno de mis hijos está enfermo no es capaz de dormir profundamente, pues cualquier ruido hace que se levante a ver como están y si no hay ruido, tambien se levanta a echar un vistazo.
Es la que se estruja la cabeza para que salgan las cuentas a final de mes. La que se pone la última en la lista de necesidades a cubrir. La que conoce mis defectos y los justifica. La que cada día, de múltiples maneras, me hace sentir amado. La que me hizo tomar conciencia de que las cosas que mas valoro en mi vida no me han costado dinero.
Mi esposa, mi compañera de viaje, mi mejor aliada en la aventura de ser padre.

MI HIJA

Seguro que mi hija Tatiana tambien desarrollara todas estas virtudes de mi abuela, mi madre y mi esposa, porque lo lleva grabado en su ser mujer.
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Mi padre, Vicente, me enseñó a respetar a las mujeres. Mi abuela, mi madre, mi esposa y mi hija me han enseñado a amarlas y admirarlas.
 Como voluntario de Cáritas Parroquial también he descubierto que son las abuelas y las madres las que vencen la vergüenza para ir a pedir alimentos para los " suyos". También son ellas las que no faltan a la visita en la cárcel para ver a sus hijos. Son ellas las que siempre están. Son ellas las que  se ponen las últimas de la lista en sus casas.

Toda esta experiencia de mi vida y "mis mujeres" han hecho que las vea como una fuente inagotable de amor desinteresado y por tanto, de entrega. 
Por todo ello, sin menospreciar a tantos padres buenos, me gusta imaginarme a Dios Amor como "MADRE DIOS"