MONICIONES PARA EL DOMINGO XV DEL TIEMPO ORDINARIO. CICLO A.

MONICIÓN DE ENTRADA.

Bienvenidos hermanos a la celebración dominical de la Eucaristía. La Palabra de Dios llega a nosotros y poco a poco nos va transformando y haciendo que demos fruto. Ahora es el momento de escuchar, reconocer y dar gracias por tanta generosidad como el Señor derrama sobre nosotros. Abramos el corazón y celebremos al Dios Trinitario que sigue recreando el mundo y nos consuela con su presencia.

MONICIÓN A LA PRIMERA LECTURA ( Is. 55,10-11)

El profeta Isaías escoge un acontecimiento que está al alcance de todos para hablarnos de la Palabra de Dios y de su acción salvadora: la lluvia.

SALMO RESPONSORIAL ( Sal.64 ) “ La semilla cayó en tierra buena y dio fruto”

MONICIÓN A LA SEGUNDA LECTURA ( Rom. 8,18-23)

San Pablo sabe de la fuerza del Espíritu que hemos recibido y también de las penas y fatigas que nos toca soportar. Es por esa fuerza del Espíritu en nosotros que somos capaces de mantenernos en el bien y en la esperanza aguardando la misericordia de Dios.

MONICIÓN AL EVANGELIO ( Mt. 13,1-23)

Jesús habla con parábolas del Reino de Dios a los que le siguen y así les invita a iniciar una vida nueva. En esta ocasión es la semilla que es sembrada y que está llamada a dar fruto. Así, la palabra de Dios en nuestra vida.

ORACIÓN DE LOS FIELES.

1.- Oremos por el Papa Francisco, para que el Señor le guarde en su amor y le sostenga en la empresa para la que ha sido llamado

2.- Oremos hermanos por la Iglesia llamada a sembrar la Palabra de Dios en todo el mundo, para que sepamos hacerlo con sencillez y sin miedo.

3.- Oremos por todos los que hoy celebran a la Virgen en su advocación del Carmelo, para que por su intercesión encuentren a Cristo en su vida.

4.- Oremos por todos los hombres que trabajan en el mar, para que por intercesión de María puedan vivir del fruto de su trabajo.

5.- Oremos por nuestra parroquia que celebra a su patrona y los 51 años de la primera piedra, para que el Señor por intercesión de María nos siga bendiciendo con su amor y su presencia.