LAPALABRA DEL DOMINGO. DOMINGO CUARTO DE PASCUA. CICLO C. DOMINGO DEL BUEN PASTOR.

APRENDER A SER PASTOR

En este domingo cuarto de Pascua  es el mismo Jesús quien no dice que  sigue estando dispuesto a entregarse por todos y cada uno de nosotros en cualquier momento o circunstancia de la vida . El es El Buen Pastor  y no está dispuesto a que nadie  arrebate de su mano las ovejas, aquellos, que les han sido dados.  Engarza de esta forma con  el Antiguo Testamento, pero con una novedad reveladora, en donde ya los profetas  hablan  de Dios como el pastor que cuida de su rebaño, de los suyos . Así lo encontramos en Ez.4; Isa.40 y los salmos 80 y 23.

 ¿Dónde está la novedad ? La novedad consiste en que si en los profetas y salmo el pastor era Yahvé,  en el Nuevo Testamento es Jesús ese  Buen Pastor, como el mismo nos lo revela en  los textos de hoy tanto en el  Evangelio como en el del Apocalipsis. Continúa la novedad  desvelándonos  y  ayudándonos a entender  la comunión entre El  y el Padre que va mas allá de un simple estar de acuerdo en vida y pensamiento. En los textos que hemos citado lo vamos vislumbrando. Aquí hay algo mas  que un simple estar de acuerdo y no es otra cosa mas que la revelación del Misterio Trinitario  que Jesús  va desvelando y poniendo ante los ojos  de los que están junto a El. Jesús y el Padre, el Padre y Jesús, es tal esta identidad de vida. Frases como  "el que me ve a mi ve al Padre", o la del evangelio  de  hoy, proclaman esa unidad total, " Yo y el Padre somos uno" , le oímos decir.

   Poco a poco Dios se va dejando poseer por la acción y la palabra del Hijo amado en espera de la acción del Espíritu Santo  que , digamos,  alumbrará la mente y los corazones con la certeza de la verdad, de aquellos que oyendo la palabra  se fiaron y pusieron su vida en la vida del Cordero.

Por tanto podemos  decir que Jesús recapitula  en sí a  ese Buen Pastor que ya desde los inicios del encuentro del hombre con Dios actúa en favor  de su criatura  y va a seguir haciéndolo  por siempre. Decimos de El y confesamos, que está sentado a la derecha del Padre para interceder por nosotros. ¿ Es que  acaso no es  eso lo mismo que se nos  dice  en la segunda lectura de hoy ?

  La imagen del Buen Pastor  ha ido  revelándose y ampliando cada vez mas en la medida en que el hombre  se ha ido acercando a Dios en su Hijo amado y se ha dejado ganar por el Espíritu Santo, que ya no es solo en el Misterio Trinitario donde habita  pues también debe habitar en nosotros. Ahí estan las Bienaventuranzas como propuestas que Jesús  nos hace para que aprendamos junto a El eso del pastoreo.

¡¡Feliz  domingo del Buen Pastor !!

José Rodríguez Díaz