LA PALABRA DEL DOMINGO

DOMINGO SEGUNDO DEL TIEMPO ORDINARIO. CICLO C.
Jun 2,1-12.

INVITADOS A LA BODA


Hoy tenemos un texto que da pie a mucha reflexión, se trata del capitulo dos del evangelio de San Juan, el conocido como el de " Las bodas de Cana," en donde Jesús convierte  el agua en vino ante la necesidad de  la familia que  se ve en un verdadero aprieto.

     Este texto  y según los  exegeta, tiene por lo menos dos lecturas: A) la del  hecho en si: Jesús convierte  el agua en vino por   sugerencia de su  madre y B) la de la Nueva Alianza que se inicia con el mismo Jesús, el cual es el Novio de la boda que da y reparte alegría a todos los invitados y decimos lo de alianza Nueva , porque la vieja,  la de los padres, ya no alegra el corazón de los invitados, ha perdido valor, se ha degradado.
 Jesús hace que  de los recipientes donde no hay mas que agua inodora e incolora por su misma naturaleza, surja el vino nuevo, el vino de la alianza nueva haciendo que no falte la alegría en este banquete de bodas  del Cordero que ha sido  anunciado y señalado por Juan a orillas del Jordán reconocido por al Padre como hijo Predilecto y Amado quien lleno del Espíritu Santo asume la tarea de vivenciar , anunciar y posibilitar la Nueva Alianza con la entrega total y absoluta de su vida al proyecto  que le ha sido encomendado: he venido para esto, dirá en alguna ocasión.

    Como vemos es un texto muy sugerente. No podemos olvidar la presencia de  su Madre en esa boda, invitada - esa invitación nos lleva hasta Nazaret, donde fue solicitada para  participar en la historia  nueva que Dios quería hacer con el hombre y mas tarde  hasta Pentecostes, donde ora con los Discípulos, apoyando a aquella nueva comunidad que aún no tiene  experiencia de la acción del Espíritu Santo en su vida, cosa que ella si ha vivido ya, sabe de que va el tema.
De todo esto son testigos los discípulos que han de aprender - viendo y sintiendo - de la acción de Dios para luego  poder anunciarlo con convicción  de  vida y con  palabra oportuna. Estos son  los que serán enviados como dice el salmo, a "Contar a todos los pueblos, las maravillas del Señor" , pero antes han de aprender con el Maestro.

     Por otro lado, el hecho de que sea en una boda donde sucede todo esto nos  recuerda a aquellos profetas que hablan  de la restauración de la Alianza por parte de Dios en términos nupciales: la desposaré, la llevará al desierto, la haré mi esposa etc, sin olvidar los salmos y el libro del Cantar de los Cantares. 

     El comentario del maestresala, reconociendo la excelencia del vino  nuevo, lo podemos entender como una mirada  hacia el futuro de la misión que le espera a la iglesia; enviada a repartir y compartir el don que le ha sido dado para su bien y el de todos  los hombres.