MONICIÓN DE ENTRADA.
Habiendo celebrado la semana pasada la Fiesta de Todos los Santos y la de los Fieles Difuntos, hoy nos disponemos celebramos el Día de la Iglesia Diocesana; de nuestra pertenencia a la Iglesia local y universal: toda la Iglesia. Los textos que se nos ofrecen y con los que se nos quiere ayudar a reflexionar son un regalo pues vemos que en ellos la fe sostiene la esperanza y alienta la vida y eso es lo propio de la Iglesia. Recibimos al celebrante.
MONICIÓN A LA PRIMERA LECTURA (Mac. 7,1-2.9-14 )
Descubrimos con la familia de los Macabeos que la fe no es solo algo personal sino que también tambien conlleva una fuerte referencia a la comunidad: el apoyo, la oración, la esperanza y los miedos compartidos terminan por hacernos mas fuerte y fieles al Señor ante la adversidad.
SALMO RESPONSORIAL.
Sal.16 "Al despertar me saciaré de tu semblante, Señor."
MONICIÓN A LA SEGUNDA LECTURA ( 2a Tes. 2,16-3,5)
Recuerda Pablo a la comunidad de Tesalónica que el amor, la gracia, el consuelo permanente y la esperanza, nos han sido dados en y por Cristo y es ahí donde hemos de ahondar para alcanzar y ayudar a alcanzar la vida eterna a los hermanos: la Iglesia es comunión y misión.
ORACIÓN DE LOS FIELES.
1.-Oremos por toda la Iglesia para que nunca se olvide que ha sido constituida para ser enviada a anunciar la Buena Noticia a los hombres de toda raza, pueblo y nación. R
2.- Oremos por nuestra Iglesia Diocesana para que siempre esté al tanto del devenir de nuestra historia, de los sufrimientos y alegrías de nuestra gente, aprendiendo y sabiendo ser testigo fiel del amor de Dios para con todos y en todo momento. R
3.- Oremos por nuestra parroquia, para que sepamos valorar las pequeñas cosas con las que Padre Dios nos regala y descubrir en ellas su amor y su misericordia. R
4.- Oremos por los que se han alejado de la fe, por los que buscan y no encuentran, por los que se sienten desatendidos, por los inmigrantes, los enfermos, los ancianos, los que viven en soledad, por los que sufren sin consuelo, para que Padre Dios se haga presente en cada una de esas situaciones y encuentren aliento de vida. R