TODOS INVITADOS
En la fiesta que celebramos este día conmemoramos el amor derramado de Dios sobre el mundo y del que nosotros sabemos. Un amor que hay que ir viviendo día tras día en en nuestro acontecer. Un amor propuesto por Jesús en la bienaventuranzas que nos han de llevar a reforzarnos en el amor al Padre y a los hermanos. No hay otro camino para llegar a la santidad a la que todos somos invitados.Los creyentes estamos llamados a caminar de cara a Dios en el ejercicio de la fe, la esperanza y la caridad. Así, participamos en la vida de Dios desde ya, desde ahora. Y no solo participamos en él, sino que seremos semejantes a él cuando le veamos tal cual es.Esta esperanza transformadora debe animar nuestro paso por la vida donde hay alegrías y tribulaciones, esperanza y desconsuelo. Se trata de ser amigos de Dios. Amistad que exige ser concreta en la relación con el otro, desde el otro, en favor del otro y que va a redundar en nuestro crecer interior. Esto es lo que nos identifica como que somos del Señor ante un mundo que en muchas ocasiones no terminar de descubrirlo y mucho menos entenderlo, por miles razones, pero es así.
La fiesta que celebramos debe llevarnos a preguntarnos donde estamos nosotros ahora mismo con respecto a los demás, cuales estan siendo nuestras actitudes, nuestros miedos, nuestras fobias, en una palabra, donde está nuestra caridad y como la vivimos.No podemos olvidar , como dice ese canto que nos gusta tanto, que " al atardecer de la vida me examinarán del amor"
Día de alegría y de esperanza en el que hemos de reforzar nuestra fe , esperanza y caridad, como decíamos mas arriba de forma que la alegría que hay en el cielo por la multitud de los santos sea también nuestra alegría y nuestro ánimo para seguir haciendo de la tierra , aunque sea muy pequeño, un trocito de cielo.
¡¡Feliz día de la santidad!!
José Rodríguez Díaz
No hay comentarios:
Publicar un comentario