sábado, 16 de febrero de 2019

LA PALABRA DEL DOMINGO

DOMINGO VI DEL TIEMPO ORDINARIO, CICLO C.
Luc. 6,17.20-26 

UNA PROPUESTA PARA UN MUNDO MAS HUMANO

En el texto del Evngelio que se  nos ofrece hoy y que es de San Lucas nos encontramos  con una invitación que Jesús hace en su momento  a un grupo grande de discípulos después de bajar del monte  con los Doce  e invita a todos, a unos y a otros,  a  tomar opción ante la vida,  por la misma vida , desde la sencillez, lo cotidiano, desde el devenir de los mismos acontecimientos  y habla y dice de  dicha  y de dolor, por causa del Reino, en donde los términos de invierten y  los conceptos adquieren  nuevo significado, sobre todo , cuando  el sufrimiento aparece en la vida, por " Causa del Hijo del Hombre,  porque  queremos seguirlo .
 No será así, advierte, con los que  quieren guardar su vida de todo riesgo, su felicidad a toda costa  y su abundancia a pesar del hambre que  pueda rodearles, todo eso  llegara un día que termine por la misma ley interna de la vida, y cuando eso  ya no sea , que les quedara?
 Recurre Jesús al ejemplo de los profetas que  vivieron su vocación, la mayoría de las veces entres la sombra y el dolor y que  murieron por  fidelidad a la Palabra y al pueblo  al que  fueron enviados. No promete Jesús  ni riquezas, ni honores, ni abundancia, ni  liberación del sufrimiento... solo pide fidelidad y no caer en la tentación  del "salvase quien pueda".  Si promete  una gran recompensa en el cielo.
 Los seguidores de Cristo, no se si nos damos cuenta, tenemos en nuestros tiempos  actuales  una  gran misión, ardua, por supuesto, ante un mundo  en donde el individualismo, el personalismo y tantos "ismos" se cuelan en nuestra vida como buenos  cuando no lo son.
 En las bienaventuranza  se nos hace una propuesta distinta a esto ultimo. La vida del Cristianos siempre  ha de estar en tensión con El Otro y los otros en un reflujo que  ha de generar concordia, entendimiento, paz, sosiego , esperanza.
   Hemos de saber y tener bien claro, que a muchas personas esto  no les va a gustar y que de entre estos  los habrá que no van a quedar con los brazos cruzados, porque  nuestra forma de vivir no les interesa, les delata  o pone en evidencia su forma egoísta de entender la vida.
 Las Bienaventuranzas son el programa de vida de Jesús y los suyos  que es capaz de cambiar este mundo del que tantas veces nos quejamos. La pregunta es ¿ Nos lo creemos?

¡¡Feliz día del Señor!! 


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