LA PALABRA DEL DOMINGO

DOMINGO XXXI DEL TIEMPO ORDINARIO. CICLO B.
MARC. 12,28-34.



     NO ESTAR LEJOS DEL REINO DE DIOS

   En el texto del evangelio de este fin de semana nos encontramos que es un escriba el que se acerca  a Jesús y le pregunta por el mandamiento principal de la ley. Esto hombres tenían en la comunidad un papel muy concreto, eran los encargados de conservar las escritura, copiándolas una y otra vez.  Se les consideraba como hombres piadosos y respetables.
 Es uno de estos hombre que  se acerca Jesús y le pregunta por lo fundamental de la Ley, Jesús le responde con lo que esta escrito y añade algo, lo del prójimo, diciendo que esto ultimo es tan importante como el primer mandamiento. 
El  buen hombre queda satisfecho con la respuesta de Jesús y la ratifica añadiendo lo de los holocaustos y sacrificios.
 Indudablemente,  debido al papel que desempeña en la comunidad y el  trato continuo con las escrituras le han hecho descubrir esa dimensión de relación entre Dios y el hombre,que ya lo decían los profetas y  que, por lo visto, el había descubierto y se atreve a compartirlo con el Nazareno.

    El encuentro termina con una invitación de Jesús  animándole a seguir por ese camino cuando  le dice que no esta lejos del Reino de Dios, como cuando uno quiere llegar a algún sitio y no sabiendo si queda mucho, pregunta. 
 El camino, el tramo que queda,hay que hacerlo. Jesús se lo insinúa  y le anima; sigue por ese camino  que es el correcto y  terminaras encontrando lo que deseas.

      No estar lejos del Reino de Dios significa que ya hay un camino recorrido. Así también nosotros cuando nos preocupamos por los demás y no lo dejamos  en  algo que sabemos, cuando hacemos de nuestros días algo que  haga feliz a los otros, cuando luchamos por la paz y la verdad. En el fondo eso es hacer de las bienaventuranzas   algo cotidiano, algo que conforma y determina nuestra vida. Ese es el camino. eso es estar en sintonía  con Jesús, con el Reino de Dios.
¡¡Feliz día del Señor!!