MONICIONES PARA EL DOMINGO XXX DEL TIEMPO ORDINARIO. CICLO C.
MONICIÓN DE ENTRADA.
Como cada semana nos reunimos para celebrar el amor, la presencia y la solicitud de Dios para con nosotros y también, para darle gracias por todos los beneficios recibidos.Que esta Eucaristía nos sirva para reforzarnos en la fe, en la esperanza y en el amor de Dios. Celebremos con alegría. Recibimos al celebrante.
MONICIÓN A LA PRIMERA LECTURA
( Ecle. 35,15b-17.20-22 )
Esta primera lectura que va a ser proclamada nos habla de la solidaridad de Dios para con todos y de forma especial para con los necesitados porque, se nos dice, " los gritos de los pobres atraviesan las nubes" Escuchemos.
SALMO RESPONSORIAL ( Sal. 33)
" Si el afligido invoca al Señor, el lo escucha "
MONICIÓN A LA SEGUNDA LECTURA
( 2ª Tim. 4,6-8.16-18)
Pablo anima a Timoteo a permanecer fiel en el camino emprendido confiando, a pesar de las dificultades y los sufrimiento ocasionados por el anuncio de la palabra, en la fidelidad de Dios que nos libra de todo mal.
MONICIÓN AL EVANGELIO ( Luc. 18,9-14)
El texto del evangelio de este domingo nos invita a vivir nuestra vida sin creernos mejores que los demás y a saber estar ante Dios con humildad reconociendo su misericordia por la que nos salva.
ORACIÓN DE LOS FIELES.
1.- Oremos por el Papa Francisco y por todos los obispos, cuya misión es anunciar el evangelio, para que siempre lo hagan con alegría, de forma cercana y con prontitud de ánimo. R.
2.- Oremos por todos los que conformamos la parroquia, para que el talante misionero movido por la urgencia del amor de Cristo , sea una realidad en todo lo que hacemos.R.
3.- Oremos por los matrimonio, los niños y los jóvenes de nuestra parroquia, para que puedan encontrar en nuestro testimonio el camino que les recuerde que son Hijos de Dios. R.
4.- Oremos por los enfermos, los ancianos, los que han perdido la fe, los que están en prisión y por todos los que buscan a Dios en su vida. R.
5.- Oremos también por todos los que nos han acompañado en otros años y hoy ya no están, para que el Señor les guarde en su amor por su infinita misericordia. R.
MONICIÓN DE ENTRADA.
Como cada semana nos reunimos para celebrar el amor, la presencia y la solicitud de Dios para con nosotros y también, para darle gracias por todos los beneficios recibidos.Que esta Eucaristía nos sirva para reforzarnos en la fe, en la esperanza y en el amor de Dios. Celebremos con alegría. Recibimos al celebrante.
MONICIÓN A LA PRIMERA LECTURA
( Ecle. 35,15b-17.20-22 )
Esta primera lectura que va a ser proclamada nos habla de la solidaridad de Dios para con todos y de forma especial para con los necesitados porque, se nos dice, " los gritos de los pobres atraviesan las nubes" Escuchemos.
SALMO RESPONSORIAL ( Sal. 33)
" Si el afligido invoca al Señor, el lo escucha "
MONICIÓN A LA SEGUNDA LECTURA
( 2ª Tim. 4,6-8.16-18)
Pablo anima a Timoteo a permanecer fiel en el camino emprendido confiando, a pesar de las dificultades y los sufrimiento ocasionados por el anuncio de la palabra, en la fidelidad de Dios que nos libra de todo mal.
MONICIÓN AL EVANGELIO ( Luc. 18,9-14)
El texto del evangelio de este domingo nos invita a vivir nuestra vida sin creernos mejores que los demás y a saber estar ante Dios con humildad reconociendo su misericordia por la que nos salva.
ORACIÓN DE LOS FIELES.
1.- Oremos por el Papa Francisco y por todos los obispos, cuya misión es anunciar el evangelio, para que siempre lo hagan con alegría, de forma cercana y con prontitud de ánimo. R.
2.- Oremos por todos los que conformamos la parroquia, para que el talante misionero movido por la urgencia del amor de Cristo , sea una realidad en todo lo que hacemos.R.
3.- Oremos por los matrimonio, los niños y los jóvenes de nuestra parroquia, para que puedan encontrar en nuestro testimonio el camino que les recuerde que son Hijos de Dios. R.
4.- Oremos por los enfermos, los ancianos, los que han perdido la fe, los que están en prisión y por todos los que buscan a Dios en su vida. R.
5.- Oremos también por todos los que nos han acompañado en otros años y hoy ya no están, para que el Señor les guarde en su amor por su infinita misericordia. R.