MONICIONES PARA EL DOMINGO V DE CUARESMA . CICLO C.

MONICIÓN DE ENTRADA.
 Porque  sabemos que la misericordia del Señor es eterna, nos acogemos a  ella contando con  su cercanía y su amor. El tiempo de la Cuaresma va llegando a su fin; no dejemos que transcurra sin habernos convertido al Señor con sinceridad y transparencia. El sana todas nuestras heridas.

MONICIÓN A LA PRIMERA LECTURA
 ( Is.  43,16-21)
Nos dice  el profeta Isaías que es el mismo Señor el que nos prepara el camino de forma que no nos falte nada en lo que pueda significar nuestro caminar. El es capaz de hacernos nuevos y realizar prodigios en nuestro favor.

SALMO RESPONSORIAL ( Sal.  125)
 " El Señor  ha estado grande con nosotros y estamos alegres"

MONICIÓN A LA SEGUNDA LECTURA
 ( Filp. 3,8-14)
Pablo considera que  nada tiene valor comparado con  tener a Cristo y así se lo dice a los de Filipos, al tiempo que les anima a trabajar en el camino de la comunión con el Señor y los hermanos.

MONICIÓN AL EVANGELIO
 (  Jun.  8,1-11)
La misericordia del Señor  se muestra palpable en su cercanía, en levantar al caído y ,sobre todo, en no condenar. El viene a salvar, a salvarnos.

ORACIÓN DE LOS FIELES.

1.- Oremos por toda la iglesia, para que con gozo , esperanza  y desde la fuerza del Espíritu viva con  esperanza de salvación  el tiempo cuaresmal. R

2.- Oremos por los enfermos de la parroquia, por los que les atienden y les visitan, para que el Señor  siempre este con ellos en la situación que les toca vivir. R

3.- Oremos también por los que  tienen el ministerio de la acogida, para que siempre sientan la ayuda del Señor en el trabajo que desempeñan. R

4.- Oremos por todos los que con alegría y entusiasmo  transmiten la palabra desde la vocación que han recibido, para que el Señor sea  su fuerza y consuelo. R

5.- Oremos por los marginados, los que están de viaje , los moribundos, los que viven solos, los ancianos, los niños y las familias de nuestra parroquia, para que el Señor sea siempre  paz y consuelo en sus vidas. R