DOMINGO DE LA INFRAOCTAVA DE NAVIDAD
FIESTA DE LA SAGRADA FAMILIA
Mt. 2,13-15.19-23.
¿ QUÉ HACER ?
Se nos propone en este domingo que miremos a la familia de Nazaret que ha de buscar caminos nuevos en aras de que la vida sea liberada de la muerte. Y nos encontramos a José, obediente a la Palabra que se le da, poniéndose en marcha hacia y una tierra extraña en espera de poder encontrar cobijo y salvar a los suyos.
Es de consideración que este hombre, no exento de problemas, este siempre en esta disponibilidad de acatar lo que el Señor le pide. Ya se nos ha dicho que era justo.
Contemplar a la familia de Nazaret debe llevarnos a mirar a nuestra familia, a la familia de hoy. Pronto nos damos cuenta de que, aún estando en un mismo sentir y en un mismo empeño, me refiero a las familias cristianas o que así se consideran, falta ese toque de fe y confianza en Dios; en otras es que ni se tiene presente aún llamándose cristianas.
En términos generales todos aceptamos que la familia es el pilar de la sociedad y que es en el seno de la familia donde mejor se posibilita el crecimiento y desarrollo de la persona en plenitud, aprendiendo diálogo, generosidad, respeto, amor... no solo los niños, también los mayores.
Es de todos sabidos que no faltan quienes quieren arrogarse este papel tan importante e intentan meter mano en algo tan exclusivo y propio del núcleo familiar, como es el crecimiento no solo intelectual, sino afectivo... Sabemos que en no pocas ocasiones el estado quiere manejar estos temas, fundamentalmente desde la educación.
Los tiempos que corren no favorecen, como debiera, pienso yo, (horarios, días libres, etc ) que los padres puedan pasar junto a sus hijos todo el tiempo posible.
Todo se llega a convertir en una lucha de horarios, compromisos, reuniones que no favorecen nada que la familia crezca, todo se convierte en una obligación y las necesidades del espíritu van siendo relegadas para otro momento, para otra ocasión.
La comunión entre padres e hijos escasea y lo mismo el tema de la transmisión de la fe.
Mirar a la familia de Nazaret, debería ayudarnos a atrevernos a pensar cual es mi ideal de familia, donde estoy y hacia donde quiero o debo caminar.
¡¡Feliz día de la Familia !!
FIESTA DE LA SAGRADA FAMILIA
Mt. 2,13-15.19-23.
¿ QUÉ HACER ?
Se nos propone en este domingo que miremos a la familia de Nazaret que ha de buscar caminos nuevos en aras de que la vida sea liberada de la muerte. Y nos encontramos a José, obediente a la Palabra que se le da, poniéndose en marcha hacia y una tierra extraña en espera de poder encontrar cobijo y salvar a los suyos.
Contemplar a la familia de Nazaret debe llevarnos a mirar a nuestra familia, a la familia de hoy. Pronto nos damos cuenta de que, aún estando en un mismo sentir y en un mismo empeño, me refiero a las familias cristianas o que así se consideran, falta ese toque de fe y confianza en Dios; en otras es que ni se tiene presente aún llamándose cristianas.
Es de todos sabidos que no faltan quienes quieren arrogarse este papel tan importante e intentan meter mano en algo tan exclusivo y propio del núcleo familiar, como es el crecimiento no solo intelectual, sino afectivo... Sabemos que en no pocas ocasiones el estado quiere manejar estos temas, fundamentalmente desde la educación.
Los tiempos que corren no favorecen, como debiera, pienso yo, (horarios, días libres, etc ) que los padres puedan pasar junto a sus hijos todo el tiempo posible.
La comunión entre padres e hijos escasea y lo mismo el tema de la transmisión de la fe.
Mirar a la familia de Nazaret, debería ayudarnos a atrevernos a pensar cual es mi ideal de familia, donde estoy y hacia donde quiero o debo caminar.
¡¡Feliz día de la Familia !!
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