SOLEMNIDAD DE JESUCRISTO, REY DEL UNIVERSO.
ULTIMO DOMINGO DEL CICLO C.
Luc.23,35-43
" Te lo aseguro: hoy estarás conmigo en el paraíso".
Con esta frase de Jesús termina el evangelio de este domingo y termina el ciclo "c" de la liturgia en el que nos ha estado acompañando el Evangelista San Lucas y junto con el cual también hemos acompañado a Jesús en su subida a Jerusalén.
A los cristianos esta fiesta de hoy no nos debe llevar por su denominación, a confusiones ni a ideas puramente terrenales, pues no se trata de un rey al uso el que celebramos, sino al rey que da su vida y prolonga su misericordia hasta el final de sus días entre nosotros, como bien nos lo dice la frase que abre nuestra reflexión y que se prolonga mas allá, mucho mas allá. Jesús no es un rey al uso. Es un rey desde el servicio y desde la entrega, por eso hoy se nos ofrece este texto de Jesús en la cruz, para que no caigamos en confusión. Jesús no es un rey de ordeno y mando, ni de coronas y cetros y se vemos alguna imagen que nos lo representa así corresponde al fruto de la imaginación humana y de un mal entendido de su realeza.
El es rey desde la pobreza, el desamparo y la cercanía, desde el perdón y la reconciliación, es rey desde las bienaventuranzas y desde su dependencia, en favor de todos, del Padre.
Esta fiesta se nos propone al final de ciclo litúrgico como colofón que nos debe ayudar a entender la dimensión trascendente de Jesús, su hacer signos y dar de comer a la gente, de su hacerlo todo en nuestro favor, hasta su muerte dolida , pero no renegada.
En el credo proclamamos su estar sentado a la derecha del Padre ¿ Para qué? para intencerder por nosotros. Es rey que no se olvida de los suyos, a los que llamó un día y un día le siguieron dejándolo todo. Es el rey pastor que se preocupa de los suyos, de todos y no esta dispuesto a perder ninguno de los que les han sido dados. Es el rey en el consuelo y en el ánimo, ante nuestras tristezas, es el que se compromete a estar junto a nosotros todos los días, hasta el fin de los tiempos.
Este es nuestro Rey. Rey en el servicio y en la entrega, en la fraternidad y la fidelidad. Rey que entregándose nos libera del pecado y nos posibilita y facilita estar juntos en la casa del Padre.
En las últimas horas de la vida de Jesús su realeza está en labios de los hombres por distintas ciscunstancias: de Pilato ¿ Tu eres rey? Curiosidad y miedo
Estando ya en la cruz, "acuerdate de mi cuando llegues a tu reino", la esperanza que aflora y la salvación que llega.
Ese , "hoy estarás conmigo en el paraíso", lo es también para todos y cada uno de los que creemos, esperamos y queremos vivir con El, desde El y por El, con el corazón puesto en el Padre, como El.
"Jesucristo, Rey del Universo" porque en El y desde El, el universo entero encuentra paz, concordia, amor equilibrio y sentido.
¡¡Feliz día del Señor!!
ULTIMO DOMINGO DEL CICLO C.
Luc.23,35-43
" Te lo aseguro: hoy estarás conmigo en el paraíso".
Con esta frase de Jesús termina el evangelio de este domingo y termina el ciclo "c" de la liturgia en el que nos ha estado acompañando el Evangelista San Lucas y junto con el cual también hemos acompañado a Jesús en su subida a Jerusalén.
A los cristianos esta fiesta de hoy no nos debe llevar por su denominación, a confusiones ni a ideas puramente terrenales, pues no se trata de un rey al uso el que celebramos, sino al rey que da su vida y prolonga su misericordia hasta el final de sus días entre nosotros, como bien nos lo dice la frase que abre nuestra reflexión y que se prolonga mas allá, mucho mas allá. Jesús no es un rey al uso. Es un rey desde el servicio y desde la entrega, por eso hoy se nos ofrece este texto de Jesús en la cruz, para que no caigamos en confusión. Jesús no es un rey de ordeno y mando, ni de coronas y cetros y se vemos alguna imagen que nos lo representa así corresponde al fruto de la imaginación humana y de un mal entendido de su realeza.
El es rey desde la pobreza, el desamparo y la cercanía, desde el perdón y la reconciliación, es rey desde las bienaventuranzas y desde su dependencia, en favor de todos, del Padre.
Esta fiesta se nos propone al final de ciclo litúrgico como colofón que nos debe ayudar a entender la dimensión trascendente de Jesús, su hacer signos y dar de comer a la gente, de su hacerlo todo en nuestro favor, hasta su muerte dolida , pero no renegada.
En el credo proclamamos su estar sentado a la derecha del Padre ¿ Para qué? para intencerder por nosotros. Es rey que no se olvida de los suyos, a los que llamó un día y un día le siguieron dejándolo todo. Es el rey pastor que se preocupa de los suyos, de todos y no esta dispuesto a perder ninguno de los que les han sido dados. Es el rey en el consuelo y en el ánimo, ante nuestras tristezas, es el que se compromete a estar junto a nosotros todos los días, hasta el fin de los tiempos.
Este es nuestro Rey. Rey en el servicio y en la entrega, en la fraternidad y la fidelidad. Rey que entregándose nos libera del pecado y nos posibilita y facilita estar juntos en la casa del Padre.
En las últimas horas de la vida de Jesús su realeza está en labios de los hombres por distintas ciscunstancias: de Pilato ¿ Tu eres rey? Curiosidad y miedo
Estando ya en la cruz, "acuerdate de mi cuando llegues a tu reino", la esperanza que aflora y la salvación que llega.
Ese , "hoy estarás conmigo en el paraíso", lo es también para todos y cada uno de los que creemos, esperamos y queremos vivir con El, desde El y por El, con el corazón puesto en el Padre, como El.
"Jesucristo, Rey del Universo" porque en El y desde El, el universo entero encuentra paz, concordia, amor equilibrio y sentido.
¡¡Feliz día del Señor!!
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